Por Gerardo Cuéllar.
El pasado viernes el Estadio Jalisco de Guadalajara fue testigo de un partido digno del olvido entre el que es el máximo candidato para jugar el próximo año en la Segunda División y el que por plantilla debiera ser considerado entre los favoritos para pelear por el ascenso a Primera División Nacional, Leones Negros de la Universidad de Guadalajara y Necaxa, respectivamente.
En el papel uno de los partidos que abrió la jornada 7 de la Liga de Ascenso lucía como un partido pobre en cuanto a lo que podía ofrecerle a los aficionados de ambos equipos y al futbol en general; Desafortunadamente tantos Leones como Rayos cumplieron los pronósticos y dejaron la impresión de que ganó el que fue menos malo sobre la cancha del Jalisco, siendo los visitantes quienes con un gol de Alfredo Vázquez se llevaron el triunfo por un gol a cero.
La situación del equipo universitario podría entenderse y hasta cierto punto justificarse ya que los Leones Negros 'renacieron' hace apenas un par de años para incorporarse a la Liga de Ascenso, curiosamente para la temporada en la que los Rayos pisaron esta división por primera vez en su historia arrasando con todo lo que había en juego y dejando un récord impresionante para regresar a Primera División de forma tal que ni el más critico de sus detractores podría intentar minimizar.
Tras las malas decisiones de su directiva como el inexplicable cese de Omar Arellano o la prolongada e injustificada permanencia de Daniel Brailovsky, los Rayos regresaron a esta división un año después de haber ascendido y a diferencia de su primer paso por la Liga de Ascenso, esta vez Necaxa llegó con un plantel mucho más limitado, y extrañamente más caro a grado tal de ser la plantilla más alta de los equipos que juegan en la división.
La pregunta obligada es ¿Por qué Necaxa no funciona?. Se puede hablar de los jugadores, del técnico, de la directiva, de problemas internos o de muchas otras situaciones pero lo mostrado por Necaxa el viernes en Guadalajara, así como lo que ha realizado a lo largo de los siete partidos disputados hasta ahora en el torneo es simple y sencillamente lamentable.
Leones Negros y Necaxa se encargaron de aburrir hasta al más optimista aficionado y dejaron en claro que están muy lejos de poder aspirar a algo en el torneo y a conseguir los tan distintos objetivos que ambas instituciones tienen. El objetivo del equipo jalisciense sin duda es eludir el descenso, el de los Rayos es en teoría, el regresar de nueva cuenta en el lapso de un año a jugar en Primera División: Tristemente jugando así, ambos equipos están a mucha distancia de poder siquiera pelear para conseguir dichos objetivos.
Es cierto que las condiciones del terreno ayudaron en poco para que los equipos ofrecieran un buen espectáculo, pero la cancha del Estadio Jalisco no podría ser utilizada como pretexto cuando durante todo el torneo estos equipos han hecho lo mismo en cada una de sus presentaciones. Necaxa se llevó de Guadalajara 3 puntos que son importantes pero que a la vez son igual de engañosos para las aspiraciones reales del equipo dirigido por Paco Ramírez, en tanto Leones Negros debería pensar en sacar la calculadora y trabajar para salvar del descenso al que también es un equipo con historia.
El pasado viernes el Estadio Jalisco de Guadalajara fue testigo de un partido digno del olvido entre el que es el máximo candidato para jugar el próximo año en la Segunda División y el que por plantilla debiera ser considerado entre los favoritos para pelear por el ascenso a Primera División Nacional, Leones Negros de la Universidad de Guadalajara y Necaxa, respectivamente.
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| Tal como se esperaba, Leones Negros de la U. de G. y Necaxa ofrecieron poco en su partido de la jornada 7. / Foto: Especial |
La situación del equipo universitario podría entenderse y hasta cierto punto justificarse ya que los Leones Negros 'renacieron' hace apenas un par de años para incorporarse a la Liga de Ascenso, curiosamente para la temporada en la que los Rayos pisaron esta división por primera vez en su historia arrasando con todo lo que había en juego y dejando un récord impresionante para regresar a Primera División de forma tal que ni el más critico de sus detractores podría intentar minimizar.
Tras las malas decisiones de su directiva como el inexplicable cese de Omar Arellano o la prolongada e injustificada permanencia de Daniel Brailovsky, los Rayos regresaron a esta división un año después de haber ascendido y a diferencia de su primer paso por la Liga de Ascenso, esta vez Necaxa llegó con un plantel mucho más limitado, y extrañamente más caro a grado tal de ser la plantilla más alta de los equipos que juegan en la división.
La pregunta obligada es ¿Por qué Necaxa no funciona?. Se puede hablar de los jugadores, del técnico, de la directiva, de problemas internos o de muchas otras situaciones pero lo mostrado por Necaxa el viernes en Guadalajara, así como lo que ha realizado a lo largo de los siete partidos disputados hasta ahora en el torneo es simple y sencillamente lamentable.
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| El partido fue muy trabado y por grandes lapsos ambos equipos se dedicaron a ensuciar el juego. / Foto: Especial |
Es cierto que las condiciones del terreno ayudaron en poco para que los equipos ofrecieran un buen espectáculo, pero la cancha del Estadio Jalisco no podría ser utilizada como pretexto cuando durante todo el torneo estos equipos han hecho lo mismo en cada una de sus presentaciones. Necaxa se llevó de Guadalajara 3 puntos que son importantes pero que a la vez son igual de engañosos para las aspiraciones reales del equipo dirigido por Paco Ramírez, en tanto Leones Negros debería pensar en sacar la calculadora y trabajar para salvar del descenso al que también es un equipo con historia.
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