@albion2112
A estas alturas resulta un tanto difícil de creer que pudiese haber algún trofeo en el mundo del tenis que Roger Federer no haya conquistado pero, al menos hasta el pasado domingo, ese era el caso, pues el equipo suizo jamás había ganado la Copa Davis, y por tanto el veterano tenista tampoco había alzado ese trofeo.
Roger Federer ganó el quinto y último punto de la serie final en la Copa Davis, y Suiza se impuso a Francia. / Foto: Especial |
Obviamente se trata de una labor de equipo, y es muy probable que de no haber sido por el gran nivel de juego mostrado por Stanislas Wawrinka a lo largo de este año los lusitanos no hubiesen podido ganar la Copa.
El triunfo se dio de una manera especial para los suizos debido a lo ocurrido hace algunos días, cuando Federer y Wawrinka se enfrentaron en las semifinales de las ATP World tour Finals, evento celebrado en Londres y el cual pone punto final a la temporada de la ATP. En aquel partido, Federer fue capaz de defender cuatro match points para terminar por llevarse la victoria con parciales de 4-6, 7-5 y 7-6. Parece que durante el juego la esposa de Federer se quejó de la actitud en la cancha de Wawrinka, lo que causó la molestia del tenista, y más tarde trascendió que hubo una fuerte discusión entre él y Federer en los vestidores.
Para empeorar las cosas, Federer se retiró de la final ante Novak Djokovic citando una lesión en la espalda, lo que hizo más amarga la derrota de Wawrinka un día antes, además de poner en duda la participación de Federer en la Final de la Copa Davis. Sin embargo, no sólo jugó, sino que aparentemente él y Wawrinka pudieron dejar atrás sus diferencias para llevar a su equipo a una histórica victoria, y hay que recordar que ambos juegan dobles en el torneo, modalidad en la que en 2008 habían conquistado juntos una presea olímpica en los Juegos de Beijing.
Es la primera ocasión en que Suiza conquista la Copa Davis. / Foto: Especial |
Que Federer (quien perdió el primer punto de la serie el viernes, aparentemente todavía con problemas en la espalda) haya sido quien cerrara la serie, tuvo un poco de justicia poética, considerando que fue precisamente en la Copa Davis, pero en 1999, que un joven de 17 años inició su carrera hacia la cima del tenis profesional. El propio jugador debe haber sentido algo especial, pues a pesar de haber pasado años restando importancia al no haber ganado nunca esta competencia, se pudieron ver lágrimas en su rostro tras ganar el punto de campeonato. Sea como sea, se trata de un trofeo más en la vitrina de uno de los mejores jugadores de todos los tiempos.
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