@albion2112
La más reciente telenovela en la NFL fue escenificada por los Jets de Nueva York, equipo acostumbrado a aparecer en las noticias más por sus constantes dramas internos que por su desempeño sobre el emparrillado.
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| Darrelle Revis es considerado como el mejor esquinero de cobertura en la NFL, y ahora jugará para Tampa. / Foto: Especial |
Este domingo, tras semanas de especulaciones, negociaciones y acuerdos inconclusos, los Jets finalmente llegaron a un acuerdo con los Bucaneros de Tampa Bay para enviar a jugar con el equipo de la Florida a quien hasta ayer era su mejor jugador, el esquinero Darrelle Revis. A cambio del talentoso defensivo, los Jets recibirán la primera selección del draft de este año de los Bucaneros, además de una selección condicional, que podría ser de tercera o cuarta ronda, en el draft de 2014.
Con este movimiento, los Jets dejan en evidencia que los días de Rex Ryan al frente del equipo están contados, pues los neoyorquinos ya empiezan a pensar en reconstruir al equipo más allá de la temporada 2013, que ahora se convierte en una crucial para las carreras de Ryan y de Mark Sanchez, su criticado QB. El contrato de Ryan termina este año, así que literalmente se juega el trabajo esta temporada, mientras que Sanchez parece ser ya un caso perdido que se mantiene como titular debido a su carísimo contrato y a que parece ser que piensan ligar su destino al de Ryan.
Para entender un poco la magnitud del movimiento y la manera en que en Nueva York han estado gastando dinero en lo que parece ser un pozo sin fondo, habría que apuntar que el salario de Revis para 2013 impacta el tope salarial de los Jets porque pertenecía al equipo al inicio del año de la liga. Son doce millones de dinero muerto para los Jets, mismos que no pueden invertir en agentes libres o en extensiones de jugadores de su plantel, y los Bucaneros solo absorben su bono de plantel, que asciende a un millón de dólares.
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| Revis fue presentado por los Bucaneros este lunes y espera jugar desde la semana 1, en contra los Jets. / Foto: Especial |
El esquinero fue presentado hoy mismo a los medios locales luego de aprobar un exámen físico y firmar un contrato por seis años con un valor de hasta 96 millones de dólares con los Bucaneros. Sin embargo, la peculiaridad del contrato es que no incluye dinero garantizado. Revis tendrá un salario nominal promedio de trece millones de dólares, además de un bono de millón y medio por cada año que permanezca en el plantel al inicio del año de la liga, e incentivos hasta por otro millón y medio cada temporada.
Volviendo al tema de Rex Ryan, la temporada 2013 luce como una misión imposible para el controvertido entrenador en jefe de los Jets. Ryan llegó a Nueva York previo a la temporada 2009, y en sus dos primeros años los llevó hasta la final de conferencia, llenando de esperanza a los aficionados de los Jets. Sin embargo, en 2011 apenas pudieron alcanzar una marca de 8-8, en tanto que la temporada pasada finalizaron con registro de 6-10, por lo que es fácil entender porque éste será un año crucial para Ryan.
John Idzik, el nuevo gerente del equipo, parece estar matando tiempo a espera de que Ryan termine de desencantar al dueño del equipo, Woody Johnson, para buscar un entrenador al lado de quien comenzar a reconstruir al equipo. Tal vez el mayor problema de Ryan sea el no tener un QB confiable, pues basta recordar que Mark Sánchez lanzó para trece touchdowns y dieciocho intercepciones la temporada pasada. Para cerrar con el drama neoyorquino habría que resaltar que en caso de que Revis, convalesciente de cirugía en la rodilla, esté listo para jugar en la semana uno, lo hará enfrentando a Ryan, Sánchez y los Jets.
Volviendo al tema de Rex Ryan, la temporada 2013 luce como una misión imposible para el controvertido entrenador en jefe de los Jets. Ryan llegó a Nueva York previo a la temporada 2009, y en sus dos primeros años los llevó hasta la final de conferencia, llenando de esperanza a los aficionados de los Jets. Sin embargo, en 2011 apenas pudieron alcanzar una marca de 8-8, en tanto que la temporada pasada finalizaron con registro de 6-10, por lo que es fácil entender porque éste será un año crucial para Ryan.
John Idzik, el nuevo gerente del equipo, parece estar matando tiempo a espera de que Ryan termine de desencantar al dueño del equipo, Woody Johnson, para buscar un entrenador al lado de quien comenzar a reconstruir al equipo. Tal vez el mayor problema de Ryan sea el no tener un QB confiable, pues basta recordar que Mark Sánchez lanzó para trece touchdowns y dieciocho intercepciones la temporada pasada. Para cerrar con el drama neoyorquino habría que resaltar que en caso de que Revis, convalesciente de cirugía en la rodilla, esté listo para jugar en la semana uno, lo hará enfrentando a Ryan, Sánchez y los Jets.
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