Por Alberto Calvo
@albion2112
La expresión de alivio en el rostro de LeBron James una vez que obtuvo el campeonato de la NBA junto al resto del Heat de Miami en mayo pasado era por momentos más visible que su júbilo, así que parece lógico pensar que a partir de ahora juega motivado pero con una presión menos, lo que pueden ser buenas noticias para el Heat.
El pasado martes, día que arrancaron las actividades de la temporada 2012-2013 de la NBA y previo a su partido contra los Celtics de Boston, el Heat realizó la ceremonia de elevación del banner que conmemora el campeonato, y los jugadores recibieron los anillos correspondientes.
Al menos para la tercia de estrellas del equipo esto debe representar la satisfacción de un objetivo cumplido, y el saber que el trabajo del coach Spoelstra ya no depende de que ellos consigan el campeonato.
Recuerdo cuando ocurrió lo mismo con Michael Jordan. Tras el primer campeonato se le veía más suelto, y no me refiero a que hubiese reducido su intensidad competitiva, si no todo lo contrario. Dejó de jugar tratando de probarle al mundo que él y su equipo eran los mejores del mundo, y empezó a jugar para mostrarse a si mismo que tan bueno podía llegar a ser. Y creo que LeBron James puede estar en una situación similar.
El primer compromiso de la campaña fue ante los Celtics de Boston, equipo al que eliminaron en las finales de Conferencia para poder acceder a la final de la NBA. El juego fue muy disputado, aunque quizás fue más por el orgullo deportivo y por la rivalidad existente entre ambos que porque cualquiera de los dos equipos se encontrase en un buen momento deportivo. Al final los campeones se llevaron la victoria, con una gran actuación de su tridente principal, además de la valiosa aportación de Ray Allen, quien enfrentó por primera vez a sus ex-compañeros.
Su segundo enfrentamiento fue enfrentando a los Knicks de Nueva York y a un Carmelo Anthony que acostumbra dar lo mejor de si ante el Heat, y no fue la excepción, y el emocional ambiente del Madison Square Garden tras el paso del huracán Sandy también contribuyó a dar un empujón anímico al equipo neoyorquino, mismo que salió con la victoria, dejando a los de la Florida con marca de 1-1 para volver a casa y reagruparse.
El sábado enfrentaron a otro equipo con serias aspiraciones de playoffs, los Nuggets de Denver, y en un juegazo, lograron salir avante por marcador de 119-116, con Ray Allen encestando el triple de la victoria. Tratándose de un equipo que hizo muy pocas modificaciones en el plantel, el Heat luce bastante sólido, sobre todo a la ofensiva.
Esta semana tenen tres partidos, pues reciben esta noche la visita de los Soles de Phoenix, el miércoles la de los Nets de Brooklyn, y el viernes visitan a los Halcones de Atlanta. El primero de ellos luce como el más flojo, pero los otros dos debieran ser auténticas batallas que pondrán a prueba el corazon de los campeones.
@albion2112
La expresión de alivio en el rostro de LeBron James una vez que obtuvo el campeonato de la NBA junto al resto del Heat de Miami en mayo pasado era por momentos más visible que su júbilo, así que parece lógico pensar que a partir de ahora juega motivado pero con una presión menos, lo que pueden ser buenas noticias para el Heat.
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| Dwayne Wade, Chris Bosh y LeBron James lograron el objetivo que los unió. ¿Qué sigue para ellos? / Foto: NBA.com/Heat |
Al menos para la tercia de estrellas del equipo esto debe representar la satisfacción de un objetivo cumplido, y el saber que el trabajo del coach Spoelstra ya no depende de que ellos consigan el campeonato.
Recuerdo cuando ocurrió lo mismo con Michael Jordan. Tras el primer campeonato se le veía más suelto, y no me refiero a que hubiese reducido su intensidad competitiva, si no todo lo contrario. Dejó de jugar tratando de probarle al mundo que él y su equipo eran los mejores del mundo, y empezó a jugar para mostrarse a si mismo que tan bueno podía llegar a ser. Y creo que LeBron James puede estar en una situación similar.
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| En solo tres juegos Ray Allen ha mostrado su valía para Miami. / Foto: NBA.com/Heat |
Su segundo enfrentamiento fue enfrentando a los Knicks de Nueva York y a un Carmelo Anthony que acostumbra dar lo mejor de si ante el Heat, y no fue la excepción, y el emocional ambiente del Madison Square Garden tras el paso del huracán Sandy también contribuyó a dar un empujón anímico al equipo neoyorquino, mismo que salió con la victoria, dejando a los de la Florida con marca de 1-1 para volver a casa y reagruparse.
El sábado enfrentaron a otro equipo con serias aspiraciones de playoffs, los Nuggets de Denver, y en un juegazo, lograron salir avante por marcador de 119-116, con Ray Allen encestando el triple de la victoria. Tratándose de un equipo que hizo muy pocas modificaciones en el plantel, el Heat luce bastante sólido, sobre todo a la ofensiva.
Esta semana tenen tres partidos, pues reciben esta noche la visita de los Soles de Phoenix, el miércoles la de los Nets de Brooklyn, y el viernes visitan a los Halcones de Atlanta. El primero de ellos luce como el más flojo, pero los otros dos debieran ser auténticas batallas que pondrán a prueba el corazon de los campeones.
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