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UFC 150: Cerrone se roba el show y Bendo retiene su título

Por Alberto Calvo.

El pasado sábado se celebró en el Pepsi Center de Denver, Colorado, el UFC 150, y a pesar de que en papel se veía como una cartelera bastante irregular, resultó ser un espectáculo bastante digno en términos generales.

La esperada revancha entre Benson Henderson y Frankie Edgar
fue una pelea tan cerrada como se esperaba. / Foto: UFC.com
El mayor atractivo de la noche era, claro, la esperada revancha entre Benson Henderson y Frankie Edgar con el campeonato de peso ligero de la UFC en juego. Edgar tenía el objetivo de recuperar el cinturón que Henderson le arrebatase en febrero pasado en el marco del UFC 144, y las expectativas eran que ambos peleadores ofreciesen un combate al menos tan bueno como el de aquella ocasión. Así fue, y a pesar de que Edgar dio su mejor esfuerzo y estuvo realmente cerca de conseguir su objetivo, no fue suficiente y se tuvo que ir nuevamente a casa con las manos vacías.

La velada empezó muy bien, con peleas preliminares emocionantes y de buen nivel competitivo. En Facebook pudimos disfrutar de un espectacular knockout de Nik Lentz, quien necesitó menos de cuatro minutos para forzar la intervención del referi e imponerse a Eiji Mitsuoka, y las peleas de FX (no disponibles por TV para América Latina) tampoco defraudaron.

Erick Pérez no dejó lugar a dudas y obtuvo un contundente triunfo
al noquear a Ken Stone en 17 segundos. / Foto: UFC.com
El mexicano Erick Perez necesitó solo diecisiete segundos para noquear a Ken Stone, dejando atrás el mal sabor de boca que quedase tras su controvertida victoria de junio pasado en su debut en UFC, cuando aparentemente el referi detuvo la pelea prematuramente. El holandés Michael Kuiper requirió de round y medio para hacer lo propio con Jared Hamman, en tanto que Dennis Bermudez venció a Tommy Hayden con una espectacular guillotina de pie en los últimos segundos del primer round, levándose con ello el bono por Sumisión de la Noche.

La cartelera principal abrió con una sorpresa cuando el jovencito Max Holloway derrotó a Justin Lawrence por knockout técnico en los segundos finales del segundo asalto. Lawrence era visto como uno de los prospectos más prometedores en la división de los pluma, pero la victoria de Holloway lo posiciona ahora como uno de los peleadores a seguir en esa división, sobre todo considerando que apenas cuenta con 20 años de edad.

Shields quiere enfrentar a Anderson Silva por el campeonato,
pero su desempeño dejó mucho que desear. / Foto: UFC.com
Yushin Okami demostró que aún le queda cuerda para rato al despachar con relativa facilidad a Buddy Roberts, en tanto que Jake Shields dio otra de sus acostumbradas exhibiciones y aburrió a la audiencia en una pelea en que quedó de manifiesto que no pertenece a la élite de la UFC ni en welter ni en peso medio, donde hizo su debut este fin de semana. Después de la pelea intentó disculpar su desempeño con la altitud de Denver, pero si ese fue realmente el caso habría que señalar que fue el único de los veinte peleadores en la función que lo resintió visiblemente.

Donald "El Vaquero" Cerrone y Melvin Guillard protagonizaron una auténtica guerra, misma que a pesar de haber durado menos de ochenta segundos fue sin duda uno de los mejores momentos de la noche. El "Joven Asesino" salió decidido a noquear a Cerrone sin importarle que este estuviese en casa, y un gancho de izquierda en los primeros instantes estuvo a punto de otorgarle su deseo. Sin embargo, Cerrone hizo gala de una gran resistencia y sobrevivió el embate de Guillard.

Un potente derechazo de Cerrone completó el daño causado por
una patada previa y El Vaquero ganó la pelea. / Foto: UFC.com
Apenas sintió un respiro El Vaquero se fue con todo a la ofensiva y pudo conectar una patada en la cabeza de su oponente, y a pesar de que el impacto no fue tan sólido como hubiese deseado, bastó para poner en malas condiciones a Guillard. Un potente recto de derecha al costado de la cabeza sirvió para mandar a Guillard a dormir. El Vaquero fue ovacionado por sus paisanos y se llevó un par de bonos a casa, pues no solo fue ésta considerada como Pelea de la Noche, si no que su derechazo le otorgó también el de Knockout de la Noche.

Finalmente llegó la pelea más esperada de la velada y no decepcionó a nadie. Edgar deseaba fervientemente recuperar el campeonato que perdió en el UFC 144, mientras que Benson Henderson quería dejar en claro que tenía todo el derecho a ser quien ostentase ese título. Edgar mostró hambre de triunfo desde el inicio del combate, pero esto fue aprovechado por el campeón, quien sacando provecho de su mayor alcance y su eficiente pateo pudo establecer condiciones. El round cerró con un intento de guillotina de parte de Henderson, muy bien colocada pero con muy poco tiempo restante, lo que permitió a Edgar sobrevivir el round.

Henderson estuvo cerca de finalizar la pelea en el primer round
con una guillotina, pero no le bastó el tiempo. / Foto: UFC.com
La casi derrota pareció despertar al ex-campeón, quien poco a poco se fue asentando y hallando un ritmo de pelea cómodo que poco a poco fue haciéndose notorio con acertadas combinaciones sobre la humanidad de Henderson. Tanto el segundo como el tercer episodios fueron muy cerrados, aunque Edgar pareció sacar la mejor parte, logrando incluso un intento de guillotina en cada uno de ellos, además de un efectivo derribo en el segundo asalto. Lamentablemente para su causa no pudo finalizar ninguno de sus intentos y las acciones se prolongaron por dos episodios más.

Los últimos dos rounds del combate fueron muy parejos, con sólidos intercambios de golpes entre ambos peleadores pero con cierto recelo a arriesgar demasiado. Esto sorprende, sobre todo de Edgar, quien inició la pelea con la agresividad que uno espera de alguien en busca de conquistar un campeonato, pero quien cerró el combate con una actitud un tanto conformista, como si pensase haber hecho lo suficiente en los rounds anteriores como para arriesgarse de más en el cierre. Creo que esa actitud displicente en el último round es la que puede haberle costado la pelea. Existe el consenso de que es muy difícil ganar el campeonato en una pelea cerrada si la decisión queda en manos de los jueces, pues éstos siempre esperarán que el desempeño del retador no deje duda alguna respecto a su superioridad en el octágono.

Edgar encontró su ritmo y distancia en la parte media de la
pelea y puso en serios aprietos al campeón. / Foto: UFC.com
En el momento que Bruce Buffer leyó las tarjetas y supimos que sería una división dividida, las cosas pintaban mal para Edgar, y así fue, pues dos de los jueces dieron la pelea a Henderson y solo uno al retador. Ahora Edgar se encuentra en una encrucijada, pues pasará mucho tiempo antes de que pueda acceder a una nueva oportunidad por el título, en parte porque ya perdió en dos ocasiones consecutivas con Henderson, y en parte por la riqueza de aspirantes en la división: Nate Diaz, Gray Maynard, Anthony Pettis, Donald Cerrone, etc.

Dana White le había sugerido hace unos meses que bajase a la división pluma, pero Edgar prefirió quedarse en los ligeros para intentar recuperar su título. Tal vez ante este segundo revés el ex-campeón esté dispuesto a reconsiderar la idea. Me parece que Edgar encajaría mejor entre los pluma de UFC que entre los ligeros, donde normalmente enfrentaba a peleadores de mayor talla y alcance. De concretarse su paso a la división anterior, muy probablemente obtendría una pelea con alguno de los contendientes pluma, como Chad Mendes, y de ganar se encontraría a un paso de buscar el campeonato que actualmente ostenta Jose Aldo.

En cuanto a Henderson, no tendrá mucho tiempo para pensar en otras cosas que no sea n defender su título. El primero en la lista es Nate Diaz, quien se ganó su oportunidad hace unos meses, y después siguen el resto de los perleadores mencionados líneas arriba. Las peleas con Edgar fueron solo la primera prueba en lo que esperamos sea una larga lucha por confirmarse como el peleador número uno de entre los pesos ligero en el mundo.
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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.
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