En las últimas semanas se ha dado una gran cobertura mediática al caso de Oscar Pistorius, atleta de origen sudafricano que está a punto de convertirse en el primer competidor en participar en unos Juegos Olímpicos utilizando una prótesis para remplazar sus extremidades perdidas.
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| Oscar Pistorius podría convertirse en el primer atleta en usar una prótesis ortopédica en unos Juegos Olímpicos. / Foto: Especial |
La historia pareció diluirse una vez que el joven corredor fracasó en su intento de dar las marcas necesarias para obtener la calificación y poco a poco fue su caso fue cayendo en el olvido, al menos hasta hace unos meses, cuando armado con el fallo judicial que le permitía participar en las eliminatorias el atleta sudafricano volvió a intentar lograr la marca necesaria para alcanzar un lugar en la representación de su país en Londres 2012.
Pistorius, de 25 años, volvió a fracasar en su intento de dar la marca que le permitiese calificar a los juegos olímpicos en los 400 metros planos, que es su prueba más fuerte. Sin embargo, la Federación de su país lo llevará como parte de la delegación olímpica, registrado como el corredor sustituto en el equipo de relevos 4x400. Durante las eliminatorias de esa prueba fue parte del equipo en algunas pruebas previas, no así en las finales, así que el hecho de que asista a la justa olímpica no es ninguna garantía de que vaya a ver acción durante la misma.
Mi opinión al respecto es la misma que hace cuatro años, pues no me parece correcto que se le permita participar en los Juegos aún cuando debiera hacerlo en las competencias paraolímpicas. La posición inicial de la IAAF al negarle la autorización radicaba en el hecho de que pruebas realizadas con el tipo de prótesis como la que utiliza Pistorius para correr, demostraban que un atleta podía mejorar su desempeño hasta en un 25 o 30 %.
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| Estudios de biomecánica sugieren que la prótesis para correr "Cheetah" otorga una ventaja competitiva. / Foto: Especial |
Otro aspecto que ha generado críticas acerca de la inclusión de Pistorius en pruebas oficiales es el hecho de que sus prótesis son más largas de lo que serían sus piernas naturales, lo que le da una zancada más larga, además de que el sistema flexible de la protesis reduce la presión en las rodillas y la ausencia de músculo representa que no se genere ácido láctico, disminuyendo los efectos naturales del cansancio muscular.
El TAS falló a su favor debido a que la evidencia reunida tanto por el profesor Brueggermann como por otros especialistas en Biomecánica de diferentes partes del mundo no era conclusiva. Si, existía el potencial de maximizar el rendimiento de un competidor más allá de sus habilidades naturales, pero esto solo se daría en el caso de que corriese bajo condiciones ideales y la prótesis estuviese ligada a su cuerpo de una manera óptima, lo cual la tecnología actual hace todavía bastante improbable.
Personalmente comparto la opinión de quienes prefieren mantener separadas las competencias para atletas con protesis. Me parece que la idea del deporte olímpico, al menos en origen, era la de permitir la competencia entre iguales en las condiciones más justas posibles. Obviamente la diferencia que puede existir desde la alimentación y las condiciones de vida, o las técnicas de entrenamiento y los diferentes niveles de avance en medicina deportiva entre diferentes países hacen que esa igualdad sea apenas existente, pero una cosa es tratar de aprovechar todas las ventajas posibles de manera natural y otra muy diferente buscar apoyo externo.
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| Ojalá que el caso de Pistorius no siente un precedente que pueda dañar la transparencia de la justa olímpica. / Foto: Especial |
Tampoco me parece nada bien el recurrir al chantaje, pues hace cuatro años, cada vez que algún medio se intreresaba en su historia, Pistorius daba a entender que la única razón para impedirle competir era por cuestiones discriminatorias. ¿Acaso no está el discriminando a los atletas paraolímpicos que corren con problemas físicos similares al suyo? Porque pareciera que él se considera como demasiado "normal" como para correr en las Olimpiadas "especiales".
Ojalá y su caso no se trate simplemente de una maniobra publicitaria de parte de la Federación Sudafricana de Atletismo y que en el futuro se analice a fondo la situación de otros atletas en situaciones similares a fin de evitar que se cuestione la transparencia de lo que debiera ser una competencia ejemplar.
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