Por Gerardo Cuéllar.
Durante los días pasados se ha hablado en demasía sobre lo que fue la breve estancia del que para muchos es el mejor jugador del mundo en suelo mexicano, Lionel Messi, quien se presentó el pasado domingo en el Estadio Azul para un partido a beneficio denominado 'Messi & Friends'.
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| Durante el primer tiempo, Lio Messi se vió cara a cara con Jorge Campos, quien le robó el show. / Foto: Especial |
Las críticas hacia las actitudes del jugador argentino, y sobre todo hacia los organizadores del evento hay sido muchas, esto debido a situaciones ajenas, casi en su totalidad, al partido que enfrentó al equipo 'Messi & Friends' y al denominado "Estrellas del Mundo", equipo en el cual tuvieron actividad varios jugadores mexicanos.
En el papel, el partido resultaba bastante atractivo, y ya sobre el terreno de juego ofreció un buen espectáculo para los aficionados que se dieron cita en el estadio de la Colonia Nochebuena. La cancha del Estadio Azul fue testigo no solamente del primer partido en territorio azteca de Messi, si no también de la participación de jugadores como Romario, Edgar Davids, Ariel Ortega, Mauro Camoranesi, Roberto Abondanzieri, Guillermo Barros Schelotto, Diego Lugano y Martín Palermo.
De igual forma, viejos conocidos de la afición mexicana como el central argentino de Necaxa, Pablo Quattrocchi y los mexicanos Jorge Campos, Joaquín Beltrán, Gerardo Torrado, Jared Borgetti e incluso dos de los campeones mundiales Sub-17, Jorge Espericueta y Julio Gómez. El partido, tal como se mencionó, ofreció un buen espectáculo para la tribuna y quizá podríamos destacar las actuaciones de Messi, Lugano, Romario y de un jugador que parece estar hecho para estos encuentros: Jorge Campos quien durante los 45 minutos que estuvo en la cancha se robó el show. El marcador, que en este tipo de partidos es completamente irrelevante fue de 5-4 favorable para el equipo 'Messi & Friends'.
Las quejas tanto de los aficionados como de los medios de comunicación en relación al partido podrían ser pocas, de hecho, la única sería el hecho de que Messi no haya completado el encuentro tras salir de cambio al minuto 70 de acción, situación que decepcionó un tanto a aquellos que pagaron un boleto por ver al mejor jugador del mundo. Ese desencanto de algunos aficionados se acrecentó cuando Lio se fue directo a los vestidores y no regresó nisiquiera al final del partido para agradecer al público su presencia en el partido.
Con el paso de las horas se supo que la salida de Messi se debió a que ingresó a los vestidores únicamente para cambiarse y de ahí dirigirse directamente al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México para tomar un vuelo con destino a Argentina, situación que causó molestia entre algunos aficionados y sobre todo, entre los medios de comunicación, a quienes el jugador evitó en todo momento con la complicidad de los organizadores.
Lionel Messi no solo salió directamente del estadio al aeropuerto, si no que su llegada al inmueble había sido de la misma forma llegando tarde al estadio, situación que evidentemente hizo que el inicio del encuentro se llevara a cabo varios minutos después de lo establecido. Messi no jugó el partido completo y se marchó incluso sin despedirse de sus compañeros faltando a las tan anunciadas conferencias de prensa que los organizadores prometieron e incluso al coctel de bienvenida que se realizó con los invitados en el hotel donde éstos se hospedaron.
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| Edgar Davids y Gerardo Torrado también estuvieron presentes en el partido disputado en el Estadio Azul. / Foto: Especial |
Por supuesto no podemos culpar al jugador ya que los organizadores son los que fallaron al no asegurar nisiquiera el hecho de que Lio pudiera estar presente en algun evento al margen del partido, nisiquiera en las conferencias ante los medios de comunicación.
Sin duda alguna, todo lo acontecido al margen del partido denota una falta de seriedad por parte de las personas que manejan a Messi, y una muy mala organización por parte de quienes trajeron al jugador a nuestro país. ¿Era tan dificil tener a Messi en las conferencias de prensa?, o bien, ¿El hacer que concluyera el encuentro y dirigiera unas breves palabras a los aficionados presentes?.
El partido ofreció lo que se esperaba, sin embargo, la frialdad y la nula interacción de Messi para con el publico que pagó un boleto para verlo en la cancha, así como la organización del evento y los engaños de los organizadores hacia la prensa hacen que este evento -hablando en términos generales- haya dejado mucho que desear.
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