Este fin de semana se celebraron los juegos número 4 en las dos finales de Conferencia de la NBA, y se mantuvo la tendencia que habíamos visto en ambas series, con los locales haciendo valer tal condición y haciendo pensar que bien pudieran ambas finales irse hasta un séptimo juego para definir a los equipos que se disputarán el campeonato de la NBA.
El gran trabajo defensivo del Thunder, sobre todo en la pintura, ha permitido que Oklahoma empate la serie. / Foto: Especial |
El coach Popovich realizó los ajustes necesarios para evitar que los tiradores de Oklahoma volviesen a victimarlos, pero se encontró con que el cuadro grande del Thunder podía atacar tan bien como defendía, convirtiéndose en el arma principla para que el Thunder obtuviese la segunda victoria en casa, empatando la serie, y mostrando que están listos para disputar cada juego a los Spurs.
Clave en ambos triunfos resultó el gran trabajo defensivo en la pintura, donde los Spurs habían causado estragos en los dos primeros juegos, además del excelente trabajo realizado por Thoba Sefolosha al encargarse del marcaje personal de Tony Parker, quien había hecho cuanto había querido en los juegos disputados en San Antonio. Ahora que la situación está pareja, podemos esperar un duelo de ajedrez entre Popovich y Brooks, dos de los mejores estrategas en la liga.
Esta noche se celebra el quinto juego de la serie, de regreso en San Antonio, y donde sin duda el Thunder hará todo lo posible por obtener el cambio de ventaja en la localía.
En cuanto a la Conferencia Este, Miami parecía tener un panorama un poco más fácil al enfrentar a uno de los pocos equipos cuya banca es menos productiva que la suya. El primer juego de la serie dejó ese detalle en evidencia, aunque el segundo puso de manifiesto que la rotación principal de seis hombres de los Celtics le puede dar pelea a cualquiera, y probablemente el resultado hubiese sido diferente en caso de que se hubiese marcado una falta de Miami sobre Rajon Rondo en el tiempo extra.
Rajon Rondo ha asumido su responsabilidad y se ha convertido en el líder de Boston dentro y fuera de la duela. / Foto: Especial |
Paul Pierce y LeBron James quedaron fuera al acumular faltas en el tiempo extra, y a Miami le pesó más la ausencia de su super-estrella, pues no pudieron volver a anotar desde que James abandonó el juego. Dwayne Wade no tuvo una mala noche, y la cerró fallando el último tiro, un triple desmarcado que hubiese representado la victoria para su equipo.
Mucho se habla de la posibilidad de que Chris Bosh pudiese ser activado durante la semana para participar en el cierre de la serie, pero su status es monitoreado día a día, y quizás no deberían poner tantas esperanzas en contar con él, pues dudo mucho que tras un par de semanas de inactividad y convaleciendo de su lesión esté listo para aportar al nivel que su equipo necesita.
La serie regresa este martes a Miami, con unos Celtics motivados y que saben que pueden vencer al Heat si mantienen el nivel mostrado en la duela del Boston Garden. Miami necesita contar con LeBron y Wade al máximo nivel, pero también requiere que alguien más levante la mano de manera consistente si es que esperan superar la serie.
Tal y como están las cosas, tenemos garantizadas series de al menos seis juegos, pero si se mantiene la tendencia a favor de los locales, bien pudiésemos estar viendo la definición de los finalistas en un séptimo juego en cada Conferencia. Como sea que se resuelva, debiera ser un gran espectáculo para todos los aficionados al deporte ráfaga.
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