Por Alex Rodríguez.
Recientemente terminó la participación de la selección mexicana sub - 23 en el Torneo "Esperanzas de Toulon", en donde el cuadro azteca obtuvo un enorme resultado al proclamarse Campeón del mismo.
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| La Selección Sub-23 consiguió ganar por primera vez en la historia en el torneo de Toulon. / Foto: Especial |
Así mismo la participación de la selección mayor parece bien encaminada para la eliminatoria mundialista, misma que aunque el Director Técnico del equipo no lo quiera aceptar, no debería representar ninguna dificultad para el cuadro Tricolor.
Tal parece que el crecimiento futbolístico de la selección mexicana ya es una realidad, sin llegar a ser el optimo o el que debería ser ya para esta parte de la historia. Y es que México es una de las naciones con más participaciones en mundiales a nivel mayor, y nunca ha sido capaz si quiera de llegar a los primeros cuatro lugares.
Es más que claro que a México ya no se le puede jugar con la banca, con selecciones menores, o con cuadros que son alternativos aunque representen a una nación de primer mundo, misma etiqueta que México ha buscado siempre y nunca la ha podido encontrar. Lo cierto es que a nivel mayor, el combinado azteca derrotó a una combinación de Brasil que fue una mezcla de categorías, y aunque podría justificar la derrota, no es así, sin embargo todo debe ser analizado desde su justa dimensión.
Lo que a mí me empieza a hacer ruido no es el lento avance de la nación azteca, sino el por qué es así cuando a nivel menor se corre a una velocidad soprendente y ahí sí pueden ser llamados una potencia, sin embargo las estrellas en el escudo, son las de los logros a nivel mayor.
Y es que en el Torneo de Toulon la selección pasó por selecciones como Holanda, Turquía, y Francia, dos selecciones a las que se les venció con autoridad y una con la que cayó por errores propios y no méritos del rival que tenía enfrente.
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| De nueva cuenta una selección menor le otorgó otro campeonato al futbol mexicano. / Foto: Especial |
Llendo más atras a los mundiales sub - 17, sub - 20 y el trabajo en las divisiones menores a nivel de clubes, no es entendible que al llegar al nivel mayor se conviertan en un equipo más. La pregunta no está en el aire porque es demasiado obvia, ¿qué sucede en la transición de un nivel menor al mayor en México?. Y es que si vemos a los equipos que ha derrotado a nivel menor y la manera en como lo hace, no entiendo como esos países derrotados terminan superando a la nación verde con el paso de los años, y con eso, le dejan la etiqueta de "Eterna Promesa" al futbol de este país que en la realidad sigue viéndose como una nación que no causa mayor problema.
Lo más importante es entender que las victorias en categorías menores, aunque son simplemente eso, no le quita presión al balompíe nacional, sino por el contrario se la da y le exige que así como esos representativos, a nivel mayor debe ser exactamente lo mismo.
Por está razón, aunque se le haya ganado a un Brasil parchado con autoridad y se tenga la camada de jugadores tan buena como se tiene, de nada servirá si al llegar al mundial no es capaz de superar una ronda en la cual se ha quedado desde 1994, y que 20 años después, el avance sea únicamente el que vimos el domingo, donde las grandes potencias ya requieren de sus mejores talentos para ganarle a un combinado mexicano, que ya es un "gigante", un "gigante que nunca será gigante".
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