@albion2112
No cabe duda que Connor McGregor está encaminado a convertirse en la próxima gran estrella de UFC, y el sábado pasado, en UFC 179, José Aldo hizo una alusión a él y Chad Mendes lo mencionó, subrayando el importante rol que ha tomado en la división pluma de la promoción.
Conor McGregor quiere pelear por el campeonato pluma de UFC, pero antes tiene que librar al menos otra pelea. / Foto: Especial |
El fin de semana se hizo oficial que la próxima pelea de McGregor será ante el alemán Dennis Siver en la pelea estelar de UFC Fight Night 59, evento a celebrarse el domingo 18 de enero en la TD Garden Arena de Boston, en lo que sería apenas su segunda pelea ante alguien clasificado en el Top 10 de la división, pues Siver está en el puesto 8 de los rankings oficiales.
El irlandés tiene apenas cuatro peleas en UFC, y ese es un argumento frecuente entre sus críticos, quienes consideran que le está facilitando un camino muy rápido hacia el título. Con dos victorias sobre peleadores de la élite de la división, esas críticas se verían aplacadas, pues sería difícil argumentar en contra de su valor como posible retador. Cub Swanson enfrentará el próximo 22 de noviembre a Frankie Edgar para decidir al próximo rival de José Aldo, y él tuvo un camino similar, pues el año pasado enfrentó y derrotó a Dustin Poirier y a Dennis Siver, lo que valida la teoría de que McGregor peleará por el campeonato en algún momento del próximo año.
Hay que elogiar también el trabajo de Joe Silva y Sean Shelby al elegir la pelea ante Siver. El alemán es un rostro conocido y un peleador bastante capaz, pero también se trata de un rival estilísticamente favorable para McGregor. Siver es primordialmente un striker de gran poder que cuenta con una poderosa patada, pero en términos generales es un peleador bastante limitado. La velocidad y movilidad de McGregor debiera ser un buen antídoto para el poder de Siver, y su peculiar estilo de entrar y salir tirando golpes desde ángulos inusuales debiera ser suficiente para ir sumando puntos, y sin descartar, claro, la posiblidad de que pueda incluso llegar a noquearlo.
La personalidad e imagen de McGregor hacen pensar que puede llegar a convertirse en una gran estrella en UFC. / Foto: Especial |
La idea parece simple: utilizar el alcance que tiene la final de la NFC para promover Fight Night 59, sin duda haciendo énfasis en la figura de McGregor, para tratar de absorber parte de esa audiencia una vez que termine el juego, y aprovechar que el estilo de Siver se presta para el lucimiento del peleador irlandés para tratar de posicionarlo como una entidad conocida para el espectador casual de UFC. Si McGregor logra una victoria clara y contundente sobre Siver, no habría más necesidad de darle largas al asunto y muy probablemente quedaría a espera de una fecha para pelear por el título.
UFC tiene grandes peleadores, pero muy pocas estrellas, y más aún, estrellas con alto potencial económico prácticamente no existen en una era post-GSP y Anderson Silva. El carisma y popularidad de McGregor podría convertirlo en una figura de alcances similares, además de que sería la primera vez que tuvieran una imagen tras la cual vender las divisiones menores, algo que quizás sólo BJ Penn haya hecho anteriormente. Conor McGregor es un peleador talentoso y carismático, y no hay duda de que merece la oportunidad de probar que puede ser el mejor del mundo en su división.
¿Está listo para ser campeón? Es difícil decirlo. Hasta ahora no ha enfrentado a peleadores con una fuerte base de lucha, por lo que su habilidad para defender el derribo o pelear a ras de piso es una incógnita, pero lo mismo se puede decir de peleadores que han llegado antes a lo más alto de las artes marciales mixtas, y es casi un hecho que ninguno de ellos tenía el potencial y carisma que hacen de Conor McGregor una figura tan valiosa e importante para UFC.
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