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UFC: Overeem y el escándalo de la testosterona.

Por Alberto Calvo.

Alistair Overeem y la UFC se encuentran en medio de un pequeño escándalo de doping que ha forzado a Dana White y a su empresa a realizar cambios en la cartelera de su próximo evento estelar, el UFC 146, donde Overeem habría de disputar el campeonato de peso completo que actualmente ostenta Junior dos Santos.

Alistair Overeem estará fuera de acción por nueve meses tras
fallar un control anti-dopaje en Nevada. / Foto: Especial
Overeem fue sometido a un examen sorpresa por parte de la Comisión Atlética de Nevada el pasado 27 de marzo, y un par de semanas más tarde se informó que la relación de sus niveles de testosterona y epitestosterona rebasaban la desviación permitida por la Agencia Mundial de Dopaje, sin que ello necesariamente represente un resultado positivo de dopaje. Antes de seguir adelante quisiera explicar exactamente que son estas sustancias y que significan los resultados de la prueba a Overeem.

La testosterona es una hormona producida naturalmente por el cuerpo humano y entre sus funciones está el desarrollo de las características sexuales secundarias y el desarrollo y fortalecimiento de los músculos. Esta última característica es la que convirtió a la sustancia en un recurso utilizado en busca de mejorar el rendimiento de los atletas profesionales, pero los efectos nocivos de su inoculación rápidamente la pusieron en la lista de sustancias prohibidas.

Aún cuando no existe forma de diferenciar entre una molécula de testosterona natural y una de testosterona exógena (la que es creada en un laboratorio), se utiliza la proporción entre testosterona y epitestosterona para determinar si existe un exceso de la sustancia en el organismo. Ambas hormonas son producidas de manera paralela, por lo que su producción natural es constante.

Para fines de dopaje se considera como atípica cualquier cantidad de testosterona que llegue a ser hasta seis veces superior a la epitestosterona existente en el organismo. Me parece que se trata de un margen demasiado alto, pero así es como está establecido en los lineamientos internacionales. Los análisis realizados a Overeem muestran una proporción de 14:1. No hay forma de saber como fue que tanta testosteona llegó al organismo de Overeem, pero resulta lógico pensar que si él no lo sabe es solo porque no quiere saberlo.

Obviamente era irreal pensar que la Comisión Atlética de Nevada fuese a autorizar la licencia de pelea que necesitaba Overeem para participar en el evento del próximo mes, razón por la cual UFC anunció los cambios a su cartel el pasado fin de semana. Junior Dos Santos defenderá su título ante Frank Mir, en tanto que Cain Velasquez, quien enfrentaría a Nir en el mismo evento, enfrentará a Antonio "Big Foot" Silva.

Alistair Overeem compareció este martes ante la Comisión Atlética de Nevada para defender su caso, y lo hizo con una excusa tan pobre que resulta casi tan insultante como estúpida. Compareció acompañado del Dr. Hector Oscar Molina, quien supuestamente le inyectó un anti-inflamatorio que había mezclado con testosterona hace un par de meses para tratar un persistente dolor en las costillas.

No solo resulta poco creíble que un atleta de alto rendimiento no tenga más cuidado con la atención médica que recibe o las sustancias y medicamentos que le son proporcionados, si no que además un médico decida utilizar testosterona para tratar una lesión en las costillas y lo haga sin informar a su paciente, un conocido atleta profesional. Y está el detalle de la reputación del Dr. Molina.

Es evidente el cambio en el físico del popular peleador
británico-holandés en unos cuantos años. / Foto: Especial
Hace poco más de un año fue demandado por la realización incorrecta de una operación cosmética para levantar los glúteos, y anteriormente había sido multado por autoridades de salud del Estado de Texas por proporcionar recetas médicas a desconocidos a través de farmacias en línea. Actualmente está relacionado con la Men's Performance Enhancement Clinic, que ofrece programas de pérdida de peso y anti-envejecimiento, además de terapia de remplazo de testosterona para hombres de todas las edades.

Sin duda es justo la clase de médicos que uno busca cuando desea atender una lesión en las costillas.

Overeem recibió una suspensión de nueve meses, que parece baja considerando la patética excusa con que quiso disculpar sus resultados, pero hay que considerar que se trata de su primera ofensa. Por esa misma razón se antoja difícil pensar que UFC decida aplicar alguna sanción adicional por su cuenta o que pudiese llegar a considerar prescindir de sus servicios. Overeem representa ingresos, y las MMA siguen siendo un negocio.

Lo que resulta lamentable es la actitud de la comisión, pues tal parecía que los miembros del comité se encontraban apenados de tener que imponerle una sanción, y prácticamente se estaban disculpando con el por tener que suspenderlo, llegando al extremo de asegurarle que esperaban tener el gusto de que en un futuro decidiese volver a pelear en el estado, pues estarían felices de otorgarle una licencia y asistir a su combate.

Dana White no lo va a cortar, pero sin duda tendrá que buscar el modo de meterlo en cintura y cuidar que no vuelva a incurrir en el mismo error, pues a pesar de todo lo que el peleador de origen holandés representa económicamente para la UFC, el costo que tendría otro escándalo en términos de credibilidad y prestigio sería mucho más alto.
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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.
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