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UFC: Belfort lució en Brasil y volverá a ser retador

Por Alberto Calvo.
@albion2112

El sábado por la noche, en Goiania, Brasil, se llevó a cabo UFC Fight Night 32: Belfort vs Henderson, evento que ofreció como platillo principal la revancha entre dos leyendas de UFC y Pride a siete años de su primer enfrentamiento.

La revancha entre Vitor Belfort y Dan Henderson fue el principal
atractivo de UFC Fight Night 32, en Goiania, Brasil. / Foto: UFC
Cuando pelearon por primera vez, en junio de 2006 como parte de Pride 32, fue Henderson quien salió con la mano en alto tras una decisión unánime, pero siete años después las cosas han cambiado mucho, y ambos llegaron a este combate en circunstancias muy diferentes. Hendo habría de enfrentar hace poco más de un año a Jon Jones por el campeonato de peso semicompleto, pero una lesión en la rodilla lo impidió, y desde entonces había sufrido un par de apretadas victorias por decisión dividida ante Lyoto Machida y Rashad Evans que lo alejaron de poder ser contendiente.

Belfort, en cambio, ha perdido sólo dos peleas desde aquel combate del 2006, y ambas fueron ante campeones del mundo, primero Anderson Silva y después Jon Jones, aunque estuvo a punto de someter a este último. Sus dos últimas peleas fueron espectaculares knockouts sobre el eterno contendiente Michael Bisping y el ex-campeón de Strikeforce, Luke Rockhold, ambas en la división de los medios, y a pesar de ello, fue él quien pidió la oportunidad de enfrentar nuevamente a Henderson, y sin ningún problema con hacerlo en las 205 libras.

El sábado, el Fenómeno consiguió lo que nadie había conseguido: noquear a Henderson. A diferencia de lo que hicieron Machida y Evans, que fue rehuir el intercambio y concentrarse en puntear desde la distancia, Belfort salió a buscar la pelea, y rápidamente pudo conectar una combinación que mandó al suelo a Hendo, a quien siguió castigando con su ground and pound. Henderson pudo sobrevivir el ataque y batalló para ponerse de pie, pero de nada le sirvió pues de inmediato se encontró con una patada en el rostro que lo dejó inconsciente.

Con una sólida patada al rostro, Belfort se convirtió en el primer
peleador en finalizar a Hendo por la vía del knockout. / Foto: UFC
Después de la pelea, Dana White afirmó que, tal y como se lo había prometido, Belfort se había ganado el derecho a volver a pelear por el campeonato de peso medio, asegurando que, a menos que ocurra algo demasiado extraño, el Fenómeno enfrentará a quien resulte vencedor el próximo mes entre Anderson Silva y Chris Weidman, causando controversia nuevamente por la forma en que concede las oportunidades de campeonato, pues no es normal que derrotar a un clasificado en peso semicompleto sirva para convertirse en retador de peso medio.

Sin embargo, creo que en UFC deberían estar un tanto preocupados acerca de la posibilidad de que Belfort pudiese convertirse en campeón. El brasileño no pelea en los Estados Unidos desde hace más de dos años, y hay quienes especulan que en algunos estados ni siquiera le concederían una licencia para pelear. La razón es que, después de su pelea con Henderson en el 2006, Belforrt dio positivo por altos niveles de testosterona, lo que derivó en una multa y una suspensión. Unos años más tarde, se reportó que su testosterona estaba por debajo de lo normal y que requeriría de TRT.

La terapia de remplazo de testosterona (por sus siglas, TRT), es utilizada por atletas con bajos niveles de la hormona en busca de recuperar el equilibrio químico de su cuerpo, pero su uso por parte de un atleta profesional requiere de una excepción médica aprobada por la Comisión Atlética del lugar donde pretenda pelear. El problema, es que la baja testosterona no es vista como un padecimiento normal por la mayoría de organismos, debido a que quienes la padecen suelen tener un historial de uso de esteroides o complementos hormonales, por lo que se cree pudiese ser un efecto secundario.

Pese a su veteranía, el Fenómeno luce aun mejor que cuando
tomó por asalto las MMA a los diecinueve años. / Foto: UFC
Siendo Belfort un peleador con una suspensión previa por testosterona elevada, es muy difícil que la Comisión de Nevada, por ejemplo, le otorgue la excepción médica, y lo mismo podría pasar con algunas otras, como la de California o la de Nueva Jersey. Hasta ahora es especulación, pero debe haber una razón por la cual cuatro de las cinco peleas que Belfort ha tenido en los últimos dos años han ocurrido en Brasil, donde la Comisión es nueva y no parece ser tan estricta como sus contrapartes estadounidenses, por lo que le ha otorgado sin reparo alguno la excepción.

El brasileño ha declarado que, en caso de que fuera necesario, suspendería el tratamiento de TRT para obtener la licencia que le permita disputar un campeonato. El problema es que en caso de que lo haga y no ofrezca otra demoledora actuación como las que hemos visto en sus últimos combates, generará más dudas acerca de la validez de usar esa terapia como tratamiento médico aprobado para un padecimiento que puede haber sido generado en primer lugar por el uso de sustancias prohibidas, y ahí está el ejemplo de Alistair Overeem, quien no ha sido el mismo desde que abandonó el tratamiento.

Tal vez es hora de que UFC se meta de lleno al tema, realizando estudios alrededor del uso de la TRT, con antecedentes y consecuencias, y reglamente o prohíba su uso de una vez por todas, porque lo peor que puede haber en el deporte profesional son atletas cuyos logros tengan que ser puestos en duda o señalados con un asterisco por las condiciones en que se dieron.
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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.
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