NFL - Diez para Anotar: Josh Freeman tiene los días contados en Tampa

Por Alberto Calvo.
@albion2112

La relación entre el quarterback de los Bucaneros de Tampa Bay, Josh Freeman, y su entrenador en jefe, Greg Schiano, parecía estar sujeta con alfileres, y este miércoles ya no pudo sostenerse más, y Freeman perdió esta mañana la titularidad en el equipo.

Mike Glennon tendrá su primer juego como titular en la NFL
este domingo enfrentando a los Cardenales. / Foto: Especial

Durante las prácticas de los Bucaneros este miércoles, el QB novato Mike Glennon fue quien tomó repeticiones con el equipo titular en vez de Freeman. Al final de la práctica trascendió que Glennon hará su debut en la NFL el próximo domingo, cuando los Bucaneros reciban la visita de los Cardenales de Arizona. Aparentemente la idea detrás de que Glennon juegue esta semana es aprovechar que el equipo descansa en la semana 5 para que el novato tenga dos semanas para estudiar y corregir cualquier tendencia o errores que se hagan evidentes durante su primer partido como titular.

Glennon, egresado de la Universidad Estatal de North Carolina, fue seleccionado en la tercera ronda del pasado draft y se caracteriza por la fuerza de su brazo. El domingo, durante el segundo medio del partido en que los Bucs cayeron ante los Patriotas de Nueva Inglaterra, se le vio en la banda calentando, pero nunca ingresó al partido, e incluso el coach Schiano comentó en la conferencia de prensa posterior que nunca fue su intención sacar del partido a Freeman en favor de Glennon. Tal parece que tres días después ha cambiado de parecer y ahora el futuro de Freeman es incierto.

Freeman ha sido el mariscal de campo titular de los Bucaneros desde mediados de la temporada 2009, que fue su año de novato, y a pesar de haber sido muchas veces llamado 'el futuro de la franquicia', nunca ha podido consolidarse como un QB consistente, acumulando un récord como titular de 24-35. Heredado de la anterior administración por el actual staff de entrenadores, su posición nunca fue segura, y las diferencias con el coach Schiano parecían incrementarse con el paso del tiempo, por lo que ya no era cuestión de si perdería el puesto titular, si no de cuando ocurriría.

La relación entre Greg Schiano y Josh Freeman está demasiado
deteriorada, y el QB ha perdido la titularidadnf. / Foto: Especial

Para complicar aun más su situación, el joven mariscal de campo incurrió en problemas de actitud y disciplina que no sólo empeoraron su relación con el entrenador, si no que lo llevaron a perder la confianza de sus compañeros. De manera extrañamente premonitoria, Freeman no aparece en la foto oficial del equipo, pues el día que ésta se tomó, él se quedó dormido y llegó tarde a la cita. Unos días más tarde se votó al interior del equipo para designar a los capitanes, y por primera vez desde su año de novato Freeman no fue elegido.

El QB de 25 años de edad está en el último año de su contrato de novato, y los Bucaneros parecen abiertos a la posibilidad de cambiarlo si aparece algún equipo interesado. Aun a pesar que hay algunos equipos necesitados de un mariscal de campo, el salario que Freeman percibirá este año, poco más de 8.4 millones de dólares, puede ser demasiado alto para acomodarlo en el tope salarial. A pesar de ello, no sería extraño que algún equipo intentase llevarlo a sus filas y tratar de negociar una extensión. Cleveland, Minnesota, Jacksonville y Oakland son algunas posibilidades.

Habrá que estar al pendiente en los próximos días para ver si alguno de esos equipos se decide a tomar el riesgo, aunque también cabe la posibilidad de que esperen a que Freeman sea cortado, o incluso a que se convierta en agente libre al final de la campaña antes de darle una oportunidad de probarse. Su inconsistencia parece ser el mayor problema, pero los mariscales con buen brazo suelen recibir más oportunidades de revivir su carrera que las que uno pudiese esperar.

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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.