@albion2112
Este jueves se celebró el séptimo juego de la serie entre el Miami Heat y los Spurs de San Antonio, en las Finales de la NBA, y tras un disputado y emocionante juego, Miami, de la mano de LeBron James, consiguió coronarse por segundo año consecutivo.
El Heat consiguió el bicampeonato de la NBA y LeBron James fue designado como el MVP de las Finales. / Foto: Especial |
Los rebotes fueron otra área donde hubo igualdad, pues ambas escuadras finalizaron con 43, 11 y 12 de ellos ofensivos. Las pérdidas de balón también estuvieron parejas, con 14 para los Spurs y 16 para el Heat.
La única diferencia considerable se dio en los puntos en la pintura, donde San Antonio tuvo 48 contra los 24 del Heat. Esa estadística había marcado tendencia a lo largo de los playoffs, sobre todo para el Heat, cuyos resultados parecían depender de su ofensiva en esa zona, pero esta vez no fue así. LeBron James y Dwayne Wade se habían visto muy bien a la hora de buscar la penetración en el juego anterior, y el coach Popovich mandó un esquema defensivo que limitaba los carriles de ataque. La respuesta de Miami fue buscar tiros desde fuera, y una gran noche de LeBron James como tirador selló el rumbo del partido.
James terminó con 37 puntos, 12 rebotes y 4 asistencias, concretando 12 de sus 23 tiros de campo y encestando 5 triples. Dwayne Wade fue el complemento perfecto, con 23 puntos y 10 rebotes. Entre ambos jugadores consiguieron 10 de los últimos 13 puntos del Heat para concretar el triunfo. Chris Bosh pasó desapercibido a la ofensiva, pero tuvo una buena actuación a la defensiva, incomodando a los tiradores de San Antonio y cerrando espacios en la pintura. Shane Battier salió del letargo mostrado a lo largo de la serie, encestando 6 triples para contribuir con 18 puntos en la victoria de su equipo.
La intensidad mostrada a la defensiva fue clave para que el Heat ganase los dos últimos juegos de la serie. / Foto: Especial |
Tony Parker no fue factor tampoco, pues la mayor parte del tiempo se encontró con la marca de LeBron James, quien limitó las penetraciones del francés y no le permitió tomar ritmo para orquestar la ofensiva de su equipo, poniendo aún más presión sobre el errático Ginobili. Habría que destacar las actuaciones de Boris Diaw y Kawhi Leonard, quienes fueron parte importante de la gran serie jugada por los Spurs, aún si al final se quedaron cortos. En el caso de Leonard habría que apuntar que a sus 21 años de edad tiene un prometedor futuro por delante.
LeBron James recibió por segunda ocasión consecutiva la designación de Jugador Más Valioso en las Finales, y acalló algunas de las críticas que lo persiguieron a lo largo de la temporada. Ahora se viene el largo periodo de descanso hasta el inicio de la próxima temporada, y habrá que ver si los Spurs inician el trabajo de renovación de la plantilla, pues a pesar del gran esfuerzo y la buena actuación de sus veteranos, el cansancio, sobre todo mental, parece haber hecho mella en Parker y más aún en Ginobili. Tal vez un poco de sangre joven en la posición de movedor no les vendría nada mal.
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