Por Gerardo Cuéllar.
@GerardoTaker
El pasado fin de semana durante la Jornada 8 del Clausura 2013 un viejo enemigo del futbol mexicano y mundial regresó a los estadios de nuestro país. Dicho enemigo parecía, salvo percances menores, totallmente controlado, sin embargo volvió a aparecer en tres distintos escenarios.
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| La violencia volivió a aparecer en los escenarios futbolísticos de nuestro país durante la Jornada 8. / Foto: Especial |
Apenas el torneo pasado en un partido amistoso del Ascenso MX entre Celaya y Necaxa en tierras cajeteras, integrantes de un grupo de apoyo del conjunto local arremetieron al término del partido ante los Rayos contra los autobuses que hicieron el viaje de la Ciudad de México, así como contra autos particulares con distintivos de apoyo al conjunto visitante.
De igual forma el autobús que transportaba al conjunto necaxista sufrió daños que provocaron que tuvieran que emprender el viaje de regreso en otro autobús solicitado a la compañía que los patrocina.
Esta vez, la Liga MX fue escenario de tres auténticas batallas campales, siendo quizá la más grave la que se presentó en el moderno Estadio Omnilife durante y al término del encuentro disputado el domingo por la tarde entre las Chivas Rayadas del Guadalajara y los otrora Panzas Verdes del León.
Aficionados de ambos equipos se enfrentaron en las tribunas del inmueble zapopano y al término del encuentro la parcialidad local 'despidió' con pedradas los autobuses que transportaban a los aficionados leoneses que acudieron a la Perla Tapatía y al del propio cuadro dirgiido por Gustavo Matosas en una situación muy similar a la que los esmeraldas sufrieron hace casi un año en Neza cuando aún militaban en el Ascenso MX.
Lo sucedido en Guadalajara sin duda alguna es una 'revancha' por lo ocurrido en contra de aficionados del 'Rebaño Sagrado' apenas el torneo pasado durante la visita de Chivas al Estadio Nou Camp de León e incluso a lo largo de la semana las amenazas por medio de las redes sociales no se hicieron esperar, situación pese a la cual no hubo un dispositivo de seguridad por parte de las autoridades que fuera el idóneo para evitar los sucesos que se presentaron.
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| Durante la semana previa al partido, aficionados de Chivas amenazaron en redes sociales a los de León. / Foto: Especial |
La violencia también apareció, en menor escala, en las afueras del Estadio La Corregidora al término del encuentro entre Querétaro y Atlas, y en el Estadio Alfonso Lastras también una vez concluído el encuentro entre San Luis y Pumas, en donde la policía tuvo participación en los enfrentamientos con las barras queretanas y capitalina. Incluso se difundió una imagen en la que un uniformado apunta con su arma al interior de uno de los autobuses de los seguidores del equipo universitario.
La Liga MX y la Federación Mexicana de Futbol abrieron ya un expediente para investigar y analizar lo sucedido en estas plazas, sin embargo y de manera lamentable aún se ve lejana alguna medida que pudiera por fin erradicar la violencia de los estadios de nuestro país.
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