@albion2112
La carrera de los Cuervos hacia el Super Bowl pasó por la difícil prueba que es visitar en Foxborough a los Patriotas de Nueva Inglaterra y lograron salir avante, asegurando que Ray Lewis pueda poner punto final a su brillante carrera en el juego más importante.
Tras cinco años en la NFL y a pesar de todas las críticas, Joe Flacco tiene a los Cuervos en el Super Bowl. / Foto: Especial |
Enfrentaron a uno de los mejores equipos de la NFL, lo hicieron como visitantes en uno de los estadios más hostiles de toda la liga y bajo condiciones climatológicas muy complicadas, y pudieron sobreponerse a todo para obtener una convincente victoria y así regresar al Super Bowl tras más de una década de ausencia.
Joe Flacco sigue mostrando su crecimiento como QB, y a pesar de haber tenido una primera mitad más que discreta, en el segundo medio desmanteló de manera sistemática a una defensiva secundaria que nunca pudo ajustar para compensar la ausencia de Aqib Talib, quien salió lesionado en el primer cuarto. Al final Flacco acumuló 240 yardas y tuvo tres pases de anotación, todos ellos en la segunda mitad.
Ray Rice tuvo números poco espectaculares, pero ayudó para que Flacco y compañía pudieran funcionar. / Foto: Especial |
Sigo encontrando un tanto desbalanceado el ataque de los Cuervos, quienes no dan el balón a sus corredores tanto como debieran, pero las condiciones del partido fueron ideales para soltar a Flacco y dejarlo buscar receptores en campo abierto.
La defensiva hizo un gran trabajo al mantener presión constante sobre Tom Brady, limitando su producción ofensiva a lo largo de todo el juego, y pese a que la secundaria contó con colaboración de los receptores de Nueva Inglaterra, quienes soltaron más pases de lo que acostumbran, consiguieron impedir que el peligroso ataque de Nueva Inglaterra tomase ritmo. La segunda mitad, impidiendo un solo punto, es simplemente digna de resaltar.
Ray Lewis dirá adiós a la NFL el próximo 3 de febrero, en el Super Bowl XLVII, enfrentando a los 49ers. / Foto: Especial |
El empuje emocional de saber que es el último juego de Ray Lewis pierde un poco de fuerza a este nivel, pero no hay que descartarlo como un factor.
En ocasiones el corazón puede suplir algunas carencias atléticas, y ante un rival tan completo y peligroso como los 49ers, cada detalle cuenta.
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