@albion2112
Existe un viejo adagio deportivo -creo que originado del fútbol soccer- que dice que las ofensivas llenan los estadios y las defensas ganan los partidos. En el fútbol americano se le adaptó para decir que las defensivas ganan campeonatos, y posteriormente se cambio para incluir a los pateadores.
Adam Vinatieri convirtió el gol de campo de la victoria en dos Super Bowls durante la década pasada. / Foto: Especial |
Tener un pateador sólido y confiable es esencial para todo equipo contendiente, por lo que suele ser una posición que da dolores de cabeza a entrenadores y jefes de personal. Bill Parcells era famoso por su intolerancia a las fallas frecuentes o en momentos importantes, llegando a haber tenido hasta cuatro pateadores en la misma temporada. Esto viene a colación por la situación que viven los pateadores de tres equipos que irán a los playoffs.
David Akers, Mason Crosby y Stephen Gostkowski son pateadores veteranos que han contribuido a muchos triunfos de sus equipos en temporadas anteriores, pero que este año no han podido mostrar la constancia y eficiencia que se espera de ellos, por lo que no sería extraño pensar que cualquiera de ellos pudiese quedar desempleado antes del final de la temporada regular mientras sus equipos buscan afinar detalles para presentar su mejor versión posible en los playoffs.
David Akers pasó de ser el pateador más seguro de la liga a
uno de los más irregulares y su trabajo peligra. / Foto: Especial
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Mason Crosby tampoco ha tenido un año fácil, y las múltiples lesiones y general irregularidad que ha tenido la ofensiva de los empacadores no ha hecho más que ponerlo en evidencia, lo cual es comprensible, pues cuando los puntos no llegan con tanta frecuencia como un equipo espera o está acostumbrado, hace que cada patada cuente, sometiendo al veterano a un escrutinio mayor del que recibiría en otras circunstancias.
Ese es el caso de Stephen Gostkowski, quien también atraviesa por el peor año de su carrera en términos de efectividad. Su caso difiere un poco de los de Akers y Crosby a causa de que juega en Nueva Inglaterra, donde la alta producción de puntos que Tom Brady y compañía consiguen semana a semana ayuda a cubrirle las espaldas. Sin embargo, es bien sabido que Bill Bellichick no gusta de dejar nada al azar, y en el caso de un juego cerrado le gustaría tener un pateador confiable que le pueda responder en el momento necesario.
La lealtad no cuenta cuando se trata de competir para ganar, y Akers, Crosby y Gostkowski lo saben. Todos ellos pueden enderezar el camino, mejorar su producción y quedarse en el equipo para competir con ellos, y quien sabe, incluso es posible que alguno de ellos se convierta en un factor importante para avanzar hacia un campeonato. Pero justo ahora, estos tres veteranos se encuentran peleando por conservar su empleo, y no hay ninguna garantía de que podamos verlos jugando en enero próximo.
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