Por Gerardo Cuéllar.
Uno de los temas que ha dado más de que hablar durante la presente semana es la mano de Emanuel Villa en la jugada que significó su segundo gol y el empate de Cruz Azul en el partido que la Máquina disutó el pasado fin de semana ante Atlante en el Estadio Andrés Quintana Roo de la ciudad de Cancún.
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| Emanuel Villa fue héroe y villano con su segunda anotación ante Atlante y tendrá que ver desde la tribuna el partido contra Jaguares de Chiapas. / Foto: Especial |
La jugada en cuestión se dió a los 86 minutos de acción, cuando los Potros ganaban el encuentro por dos goles a uno. Maranhao recorrió la banda izquierda y desde el borde del área centró para Villa que cerraba por el centro, el balón golpeó el brazo del atacante argentino y se fue al fondo de las redes para que Cruz Azul consiguiera el empate. Los reclamos de los jugadores azulgranas al árbitro Fernando Guerrero no se hicieron esperar y tampoco consiguieron que cambiara su decisión, la segunda polémica en este torneo ya que él mismo, un par de semanas antes validó un gol de Tigres ante Querétaro en una acción en la que el balón había abandonado claramente el terreno de juego.
Tras la acción de Villa, se ha hablado mucho del famoso 'Fair Play' o 'Juego limpio' y una vez que el jugador aceptó que el balón había golpeado en su mano, la Comisión disciplinaria en voz de su Presidente, Alfonso Sabater comenzó a manejar un possible castigo para el jugador, mismo que desde el lunes por la tarde se oficializó tras darse a conocer que Emanuel Villa sería suspendido un encuentro y además se había hecho acreedor a una sanción económica.
La pregunta que queda en el aire es si es justo o no, que se multe y se suspenda un partido al jugador, ya que aún cuando una vez terminado el encuentro él mismo le informó al árbitro que el gol había sido con la mano, no puede argumentar que se le esté castigando por haber sido honesto ya que para hablar de honestidad tendría que habérselo comunicado al silbante una vez que éste había dado por válida la anotación.
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| Fernando Guerrero ha tenido dos decisiones muy polémicas en lo que va del torneo y podría poner en peligro su estancia en Primera División. / Foto: Especial |
A mi parecer la sanción al 'Tito' Villa es injusta porque en caso de que Fernando Guerrero se hubiera percatado de la mano, lo más que habría sucedido es que se hubiera invalidado la acción y probablemente que se hubiera amonestado al jugador, lo cual no acarraría la suspensión que no le permitirá estar en la cancha cuando Cruz Azul reciba este sábado a Jaguares en el Estadio Azul.
Al margen de esto, da la impresión de que tanto la Comisión Disciplinaria, como la Comisión de Arbitraje y la propia Federación Mexicana de Futbol se han metido en un problema mayor, ya que con el castigo a Emanuel Villa están sentando un precedente que puede complicarles el trabajo cada semana, ya que acciones alejadas del 'Fair Play' ocurren prácticamente en cada partido. ¿Cuántos jugadores intentan tomar ventaja de determinada situación estando en el terreno de juego?, ¿Cuántos se tiran clavados dentro del área o fingen faltas?. Al igual que Villa, muchos otros jugadores tendrían que ser castigados en la mesa al término de cada jornada y dudo que esto vaya a suceder de manera regular.
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| Al igual que Aarón Padilla en la Comisión de Arbitraje, el trabajo de Alfonso Sabater y su Comisión Disciplinaria deja mucho que desear gracias a sus decisiones. / Foto: Especial |
Lo peor es que todo el problema se genera gracias al mal momento que está viviendo el arbitraje de nuestro país y que gran parte de ese problema se debe a que no hay gente capáz al frente de la Comisión de Arbitraje. ¿No es absurdo que a Fernando Guerrero después de su error lo hayan suspendido una jornada solo para que regrese y se vuelva a equivocar y lo vuelvan a suspender una jornada, mientras al mejor árbitro de lo hayan castigado cinco partidos por mostrar dos tarjetas amarillas de forma simultánea?.
¿Qué es más grave?. ¿Robarle un punto a Querétaro y dos a Atlante o mostrar dos tarjetas?. Por si fuera poco ante las malas actuaciones, en esta jornada, dos de los silbantes con mayor jerarquía volverán a la actividad pese a no encontrarse en su mejor estado físico y no haber pasado dichas pruebas. ¿A qué está jugando la FMF y el señor Aaron Padilla?, ¿A qué está jugando Alfonso Sabater y su comisión disciplinaria?. No cabe duda que Raúl Arias tendría razón si dijera que el futbol mexicano es "una pachanga".
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