NFL 2011: 10 para Anotar (Semana 8)

Por Alberto Calvo.

La parte media del calendario de la temporada es la que se supone tiene algunos de los juegos más flojos y/o menos atractivos del año, pero suele ser también cuando se dan las grandes sorpresas. El domingo no fue la excepción y pasado el mediodía parecían estarse gestando tres grandes sorpresas. Al final solo una de ellas se concretó, pero la emoción de los dos regresos ayudó a hacer más entretenida la acción de esa tarde. Estas son diez reflexiones de lo que me dejó la jornada.

El Norte (de la AFC) se defiende bien

La defensiva de los Cuervos es una de las mejores en la NFL
desde hace varios años. / Foto: Especial

Cuando ve uno la tabla de las mejores defensivas totales, es decir, aquellas que permiten menos yardas a las ofensivas contrarias, sorprende descubrir que cuatro de las primeras cinco juegan en la misma división. Cuervos, Acereros, Bengalíes y Cafés, es decir, la AFC Norte, son los únicos equipos que, junto a los Texanos de Houston, permiten un promedio de menos de 300 yardas por partido a sus oponentes. No es de sorprender que tres de esos equipos se encuentren enfrascados en una cerrada pelea por su división. Quizás si los Cafés tuvieran una ofensiva un poco más consistente podríamos hablar de cuatro equipos realmente parejos peleando por esa división.

Cuervos vs. Acereros, round 2 - 2011

Y hablando de peleas entre equipos parejos, el próximo domingo se enfrentan precisamente dos de esas férreas defensivas en un nuevo capítulo de la que en los últimos años se ha convertido en una de lass rivalidades más atractivas en la NFL. Los Cuervos visitan el Heinz Field en un momento peculiarmente interesante para ambos equipos, pues a pesar de que ambos son precisamente reconocidos por su trabajo a la defensiva, la historia del juego será ahora definida por lo que hagan las ofensivas. Los Cuervos tienen un par de semanas sufriendo para mover el balón, en tanto que los Acereros vienen de dar una gran demostración de juego vertical y control de la posesión. Ambos equipos se han caracterizado siempre por basar su ataque en su juego terrestre, pero este año parecen estar intentando cambiar las cosas, aunque uno de ellos con mucho mejor éxito que el otro. Los Acereros finalmente se vieron como el ataque que yo vislumbraba en la pretemporada, así que ahora lo importante será descubrir si pueden hacerlo de manera consistente.

Las Águilas remontan el vuelo
No se si sea el agua en Pennsylvania o si se trate simplemente de una casualidad, pero el otro equipo de ese estado, las Águilas de Filadelfia, parecen estar de regreso. Al igual que los Acereros, las Águilas habían decepcionado en sus primeros juegos de la temporada, sobre todo porque se creía que iban a tener un gran año tras las sonadas adquisiciones que realizaron durante la agencia libre. El domingo ante los Vaqueros de Dallas dieron una gran exhibición a ambos lados del balón y demostrando que están de vuelta en la pelea por su división. Andy Reid se mantiene invicto en juegos posteriores a su semana de descanso y Juan Castillo parece haber realizado los ajustes necesarios en su defensiva para sacarle el mayor provecho posible a los grandes jugadores con que cuenta. Si el equipo se mantiene sano habrá que seguir de cerca su desempeño, pues jugando como el domingo son un serio candidato a pelear con todo en busca del campeonato de la NFC.

Callando al cerrado Ryan

Los hermanos Ryan heredaron de su padre el gusto por hablar
de más y hasta ahora no han podido respaldar con hechos
 sus bravuconerías. / Foto: Especial

La verdad es que todo apunta a que se trata de un mal de familia, pero sigue siendo de sorprender la facilidad con que los gemelos Ryan terminan siempre con el pie metido profundamente en la boca. Rex no podrá descansar de las críticas hasta que no consiga el título en un Super Bowl, tal y como ha prometido, en tanto que Rob parece empeñado en proporcionar motivación adicional a sus rivales con sus declaraciones previas a los juegos, tal como sucedió con Calvin Johnson, de quien dijo no sería más que el tercer receptor si jugase para los Vaqueros, solo para ver como Megatron destrozaba a su defensiva y los hacía ver mal con dos recepciones de anotación en el último cuarto, o con las Águilas, a quienes prometió patear el trasero en cuanto se enfrentasen. Tal vez lo más preocupante en el caso de Rob es que él no es el entrenador en jefe de los Vaqueros, poniendo en mala posición con sus declaraciones tanto a Jerry Jones como a Jason Garrett.

El estilo Harbaugh
Tal vez el opuesto de los Ryan serían los Harbaugh, par de hermanos que conducen a sus equipos con gran intensidad, pero quienes se aseguran de manifestarla solo en el emparrillado y respetando siempre a sus rivales. Los Ryan son, al igual que su padre, cerebros defensivos, en tanto que los Harbaugh son entrenadores de mentalidad ofensiva. A pesar de ello, ambos son conscientes de la importancia de contar con una sólida defensiva a partir de la cual construir a su equipo. Es muy fácil hallar paralelos entre ambos hermanos y sus equipos, pero lo más importante es señalar la forma en que contagian a sus jugadores de su mentalidad altamente competitiva. Será interesante ver quien de los cuatro es el primero en obtener algún campeonato.

El Oeste (de la AFC) es Tierra de Nadie 1: San Diego
Al inicio de la temporada existía un consenso entre prensa y analistas acerca de que los Cargadores de San Diego eran el equipo más regular y fuerte de la AFC Oeste, pero los sucesos de las últimas dos semanas han sacudido la fe incluso delos más fieles creyentes de Norv Turner. Los reflectores y la culpa suelen centrarse en el veterano entrenador y su reputación de ser alguien que no sabe ganar. Sin embargo, las dos últimas semanas los flamígeros dedos de los aficionados apuntan también a Philip Rivers, quien dio un juego horrible ante los Jets hace un par de semanas y, a pesar de una buena actuación el lunes por la noche, tuvo un mal intercambio con el centro Marcus McNeill y permitió que los Jefes sacaran el triunfo en tiempo extra.

El año pasado comenté que era la última llamada para que San Diego intentase buscar un campeonato y parece ser que estaba en lo cierto. El equipo se hizo viejo y ahora sufre por falta de talento en varias posiciones, sobre todo a la defensiva. Creo que pueden hacer algunos ajustes para mantenerse en la pelea por la división y llegar a playoffs, pero también estoy convencido de que los días de Norv Turner en San Diego están contados.

El Oeste (de la AFC) es Tierra de Nadie 2: Kansas City

Superstición o no, Todd Haley parece haber hallado la forma
de revivir a los Jefes y meterlos en la pelea. / Foto: Especial

Supongo que necesitamos acostumbrarnos a la raída y deslavada gorra de Todd Haley, así como a su espesa barba, pues dudo que el supersticioso coach esté pensando en deshacerse de ellas, al menos por ahora. Los Jefes volvieron a ganar el lunes por la noche en un juego con tintes de dramatismo, y aún a pesar de que el equipo tiene que mejorar en muchos aspectos, el lado emocional y la motivación del equipo no podían estar mejor. Sobreponiéndose a las lesiones y a un difícil inicio de campaña con tres derrotas consecutivas, Kansas se encuentra ahora en un triple empate con los Raiders y los Cargadores en lo que pinta para ser una cerrada carrera en busca de los playoffs. El próximo domingo reciben a Miami, así que puede ser que la gorra y la barba sigan aquí la próxima semana.

El Oeste (de la AFC) es Tierra de Nadie 3: Denver y la Tebowmanía
¿Está Tebow listo para triunfar en la NFL? Esa es una de las preguntas que más se han hecho alrededor de la liga en las últimas semanas y tal parece que la respuesta es un rotundo y casi unánime no. Es innegable que Tebow es un gran atleta y un líder en el terreno de juego, pero parece ser que eso no es suficiente para un QB titular en la NFL. Desde que Josh McDaniel lo tomase el año pasado en el draft colegial hubo muchos escépticos que no creían que la exitosa carrera que el ex-QB de la Universidad de Florida tuvo como colegial pudiese trasladarse fácilmente a la NFL, y es evidente que tenían razón.

La velocidad a que se juega en la liga disminuye el potencial explosivo de Tebow, obligándolo a jugar desde la bolsa de protección, algo completamente nuevo para él. Sin duda ajustar el plan de juego a fin de explotar mejor sus habilidades ayudaría, pero creo que la curva de aprendizaje necesaria para convertirlo en un titular consistente es mucho más empinada de lo que la mayoría de los equipos aceptaría como compromiso. No me extrañaría en las próximas semanas ver de regreso a Kyle Orton bajo el centro de los Broncos, o incluso quizás a Brady Quinn intentando demostrar que se merece una oportunidad. Como quiera que sea, no veo a Tebow como un QB titular de la NFL. Al menos no ahora, y mucho menos en Denver.

Pánico en Nueva Orleans
Tal vez fue exceso de confianza tras haberle pasado por encima a los Potros una semana antes, o quizás fue el empuje motivacional que representó para los Carneros tener como invitados a los Cardenales de San Luis, recién coronados como campeones en la Serie Mundial de las Grandes Ligas, o simplemente un ejemplo más de que en un domingo cualquiera, todo puede suceder en la NFL. Como sea, creo que nadie esperaba que los Santos fuesen a ser tan claramente dominados por los Carneros en su visita a San Luis, con una deplorable actuación de los Santos y un elogiable esfuerzo de parte de los pupilos de Steve spagnuolo, quienes consiguieron su primera victoria de la temporada. Si algo ha caracterizado este año a los Santos es su irregularidad, así que no descartaría verlos dar una gran actuación ante los Bucaneros, aún cuando en teoría se trata de un juego más complicado.

Peyton Hillis y la maldición de Madden

Peyton Hillis parece ser la más reciente víctima de la
"maldición" del popular videojuego. / Foto: Especial

El año pasado Peyton Hillis corrió para más de 1200 yardas y se convirtió en la sensación, no solo en Cleveland, si no por toda la Unión Americana, alcanzando un nivel de popularidad tan alto que en la votación de aficionados para decidir quien aparecería en la portada del popular videojuego NFL Madden superó a figuras como Michael Vick o Tom Brady. Lamentablemente parece haber caído víctima de la famosa "maldición" que popularmente se asocia con ese juego, pues está teniendo un año para el olvido tanto en el terreno de juego como fuera de él, lo cual no es nada bueno considerando que pretendía entablar negociaciones de cara a un jugoso contrato que lo atase por algunos años con el equipo de los Cafés. A veces pareciera que hay algo más detrás de estas situaciones, pero en realidad me parece que se trata simplemente de un caso de fama mal manejada. Ojalá le alcance lo que resta del año para enderezar el rumbo, pues de otro modo solo ayudará a alimentar uno de los mitos más populares en el mundo del entretenimiento deportivo actual.

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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.