@albion2112
La noche del sábado, UFC 166, evento celebrado en el Toyota Center de Houston, Texas, ofreció a los aficionados a las artes marciales mixtas una de las más excitantes funciones que hayamos presenciado jamás, llevando a especular sobre si se trata del mejor evento en la historia del UFC.
El brutal enfrentamiento entre Diego Sanchez y Gilbert Melendez merece un lugar entre las mejores peleas de la historia. / Foto: UFC |
La ex-campeona de Strikeforce, Sarah Kaufman, se enfrentó a Jessica Eye en una pelea caracterizada por la insistente agresividad de ambas peleadoras. Kaufman es una de las mujeres con mayor pegada en las artes marciales mixtas, y en el tercer asalto pudo lastimar a su rival. Sin embargo, la mayor variedad de ataques intentados por la siempre móvil Eye parecen haberle ganado el gusto de los jueces, permitiéndole llevarse una victoria por decisión dividida.
El ex-campeón peso medio de Bellator, Hector Lombard, no había lucido bien en UFC, y su marca de 1-2 lo llevó a probar suerte en peso welter. En su debut en la división enfrentó al ex-campeón de Strikeforce, Nate Marquardt, y la diferencia fue notoria, requiriendo menos de dos minutos para mandar a dormir a su rival. La cartelera preliminar terminó con el duelo en peso medio entre Tim Boetsch y CB Dollaway, que resultó una pelea de ida y vuelta, interrumpida en un par de ocasiones por piquetes de ojo, y en la cual Boetsch salió vencedor en una confusa decisión dividida.
Jessica Eye y Sarah Kaufman dieron otro ejemplo del espectáculo que pueden ofrecer las peleas de la rama femenil. / Foto: Especial |
Toda la atención estaba centrada en las dos peleas estelares de la noche, pero fue la tercera de la cartelera principal la que se robó el espectáculo. Diego Sanchez siempre se ha caracterizado por ser un auténtico guerrero dentro del octágono, y su eterna voluntad de darlo todo en cada pelea sin la menor preocupación por su integridad física lo ha convertido en un favorito de la afición. La guerra sin cuartel que libró con Gilbert Melendez sólo puede describirse como épica, y es ya fuerte candidata a ser considerada como la Pelea del Año.
Daniel Cormier se mostró muy superior a Roy Nelson, dominándolo a lo largo de los quince minutos de pelea para llevarse una cómoda victoria por decisión unánime, aun si la pelea resultó poco excitante, especialmente viniendo detrás de la de Sanchez y Melendez. Finalmente, en el combate estelar -que ya comentamos más a fondo por aquí-, Cain Velasquez volvió a dar muestra de su superioridad, confirmándose como el mejor peleador de artes marciales mixtas en peso completo, noqueando en el quinta asalto a Junior dos Santos tras propinarle una golpiza memorable durante toda la pelea.
Lo que hubiese podido pasar como una muy buena cartelera de UFC fue elevada a otro nivel por la espectacular demostración de pundonor y valentía de Diego Sanchez y Gilbert Melendez, así como por la gran exhibición del monarca de peso completo, permitiendo que inicie el debate acerca de si UFC es la mejor cartelera ofrecida jamás por la promoción. Sea como sea, de no ser así, sin duda es la mejor en mucho tiempo.
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