El pasado fin de semana se celebró en el Palau Sant Jordi de Barcelona, España, la fase final de la Copa del Rey, con partidos de eliminación directa entre los ocho mejores equipos del certamen. La final del domingo fue el más reciente capítulo de la gran rivalidad, enfrentando al Regal Barça y al Real Madrid.
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| El Real Madrid puso fin a una espera de diecinueve años para volver a conquistar la Copa del Rey. / Foto: Especial. |
Es bien sabido que la mayor fortaleza del Real Madrid está a la ofensiva, así que no fue sorpresa ver que desde el primer momento en que saltaron a la duela buscaron con agresividad la canasta rival. Lo que si sorprendió fue la determinación con que salieron a jugar defensa y el énfasis manifiesto en dominar los rebotes en ambos lados de la cancha. El Barça se caracteriza precisamente por su sólido juego defensivo y por el control de los tableros, pero es evidente que en el primer periodo se vieron abrumados por el empuje de los merengues.
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La defensiva del Barça fue superada durante la mayor parte del
juego, abriendo la puerta al triunfo merengue. / Foto: Especial.
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El segundo periodo abrió con una ventaja de cinco puntos para el Madrid y más de lo mismo, pues los merengues se adueñaron del ritmo de las acciones y nunca dejaron que los catalanes se terminasen de ordenar en la duela. La única preocupación de Pablo Laso, el timonel del Madrid, era que su cuadro medio se estaba llenando de faltas en la zona de la pintura. Un triple de Llull puso fin al primer medio con ventaja para los visitantes con marcador de 33-42.
El segundo medio mostró a un Barça más ordenado a la defensiva, y pronto se empezó a mostrar ese orden también al ataque. Dos triples consecutivos de Lorbek los acercaron a solo un punto de diferencia, pero entonces apareció desde la banca merengue Jaycee Carroll, quien contestó los triples y restauró la ventaja de su equipo y dio al equipo catalán otro motivo de preocupación, abriendo más espacios para Llull.
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| El 23 merengue ayudó con 23 puntos a que su equipo ganase su Copa número 23 y fue el MVP del juego. / Foto: Especial. |
Para el Madrid es la vigésimo tercera ocasión en que alzan la copa, superando por una al Barça, con quienes estaban empatados en veintidós campeonatos. Sin duda el impacto moral de esta victoria debiera verse reflejado en la liga, donde todavía queda bastante del campeonato pero sin lugar a dudas estos dos equipos volverán a ser protagonistas.
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