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Octágono UFC | ¿Está listo Rory MacDonald para alcanzar la cima de los welter?

Por Alberto Calvo
@albion2112 

Rory MacDonald tiena apenas 24 años de edad, pero acumula ya un nada despreciable récord profesional de 17-2 (8-2 en UFC), y finalmente parece listo para cumplir con todo el potencial que desde hace un par de años se anticipaba.

La dominante victoria de Rory MacDonald sobre Tyron Woodley
lo ha puesto un paso más cerca de su objetivo. / Foto: UFC.com
El sábado por la noche, en la pelea co-estelar de UFC 174, Rory dominó de manera categórica y convincente a Tyron Woodley, quien tenía apenas cuatro peleas en UFC pero venía de derrotar de manera consecutiva a Josh Koscheck y Carlos Condit y parecía listo para asaltar la parte alta del ranking de UFC de peso welter, con la mira puesta en el campeonato que actualmente ostenta Johny Hendricks.

Si Woodley tenía un plan de batalla para enfrentar a Rory, éste nunca lo dejó ejecutarlo. Utilizando su jab y patadas para establecer la distancia, el canadiense hizo gala de su golpeo de precisión, pero sin especular demasiado. La mayor parte del tiempo tuvo a su rival de espaldas a la malla, y sólo la desesperada defensa de Woodley en el último round impidió que lo finalizara.

Rory debutó en UFC en enero de 2010, y desde entonces parecía listo para competir al más alto nivel, derrotando a Mike Guymon con una sumisión en el primer asalto. Su primera gran prueba vino unos meses más tarde, todavía antes de cumplir 21 años, cuando enfrentó al ex-campeón de WEC, Carlos Condit, y estuvo a menos de un minuto de derrotarlo por decisión unánime, que es lo que indicaban hasta ese momento las tarjetas de los jueces, pero fue víctima de un knockout en los últimos segundos. Tan impresionante fue su desempeño en esa pelea, que Georges St-Pierre lo invitó a integrarse al Tristar Gym, en Montreal, para terminar de pulir sus habilidades.

Nate Diaz, Mike Pyle, Che Mills, BJ Penn y Jake Ellenberger cayeron ante él a lo largo de los siguientes tres años, y todo parecía listo para que el joven prospecto canadiense se convirtiera en un legítimo contendiente dentro de la categoría de las 170 libras. Sin embargo, una conservadora y titubeante actuación ante Robbie Lawler en noviembre pasado se tradujo en su segunda derrota profesional, y muchos empezaron a cuestionarse si realmente tenía lo necesario para dar el siguiente paso, e incluso se especulaba que su amistad con GSP pudiera ser un problema, pues Rory expresó en varias ocasiones que no quería pelear con su mentor y amigo.

Cerca estuvo Rory de poder finalizar a su
rival en el tercer asalto. / Foto: UFC.com
Sin embargo, la derrota ante Lawler coincidió con el retiro, aparentemente temporal, de St-Pierre, y esto pareció renovar la motivación de Rory para conquistar la cima de peso welter en UFC. Su mentor ya no es una sombra que le impida mirar a lo más alto, y el joven canadiense, quien cumplirá 25 años en unas cuantas semanas, parece estar listo para cumplir con todas las expectativas que lo han seguido desde su debut en la promoción. En febrero pasado venció a Demian Maia en una pelea complicada, pues tuvo que hacer gala de su gran defensa en el piso para evitar una sumisión en el primer asalto, y logró dominar de pie en los siguientes dos rounds al peligroso y veterano brasileño.

Ahora, con la categórica victoria conseguida sobre Woodley, Rory sólo espera su turno para demostrar que puede ser el monarca de la división, haciendo honor a las dos etiquetas que hace algún tiempo cualgan de sus hombros: "el futuro de la división", y "el sucesor de GSP". No había ninguna garantía de que el vencedor del sábado tendría una oportunidad de pelear por el título, pero sin duda no falta mucho para que Rory reciba esa oportunidad. Por lo pronto, el canadiense tendrá que esperar a ver que ocurre el mes que entra en el combate entre Lawler y Matt Brown, del que muchos esperan emerja el próximo retador, pues en caso de que ninguno de ellos le llene el ojo a UFC, bien podría ser el chance de Rory.

Lo más probable es que tenga que esperar hasta que el ganador entre Brown y Lawler enfrente a Hendricks, y muy probablemente tendría que enfrentar a otro peleador de la parte alta de los rankings, quizás Hector Lombard o el perdedor de Lawler y Brown, o incluso, si coinciden los tiempos, el propio Carlos Condit, quien está fuera de acción por una lesión en la rodilla. Lo que es un hecho es que en los próximos meses el peleador canadiense tendrá oportunidad de mostrar que las expectativas estaban justificadas, y que realmente puede convertirse en el mejor peleador en las 170 libras.
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About Alberto Calvo

Apasionado del mundo de los deportes desde que tiene uso de la razón. Nació en la Ciudad de México y no tiene entre sus planes el abandonar la capital.
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