@albion2112
Cuando parecía que los Acereros de Pittsburgh habían hallado el modo de ganar partidos sobreponiéndose a todas sus ausencias y carencias con un sólido juego defensivo y un ataque que, bajo el mando de Ben Roethlisberger, hallaba el modo de producir puntos, ocurrió lo impensable y perdieron a su QB titular.
Los Acereros no se pueden permitir tener a Roethlisberger en la banda, y les urge su regreso a la acción. / Foto: Especial |
Si alguien puede atestiguar el rigor físico que estos juegos representan, es Byron Leftwich, quien jugó en lugar del Big Ben y pagó el precio de enfrentar a la dura defensiva de Baltimore, sufriendo también una lesión que, aunque le permitió acabar el juego, lo dejó fuera de acción para la semana 12, cuando fue Charlie Batch el encargado de comandar el ataque acerero en su visita a Cleveland.
Batch pasó muchos apuros para poder producir con su ofensiva, y después del medio tiempo los ajustes realizados por Cleveland bastaron para apagar por completo el ataque acerero y darle la vuelta al juego, ganando con marcador de 20-14. Claro que sería injusto culpar solo a Batch por la ineficiencia ofensiva de Pittsburgh, pues la exhibición que dio el ataque terrestre, sin importar quien fuese el corredor, fue francamente penosa, sumando cinco balones sueltos a las tres intercepciones sufridas por Leftwich, sumando ocho perdidas de balón.
Ni Charlie Batch ni Byron Leftwich pueden remplazar al Big Ben. No con la línea ofensiva que tiene Pittsburgh. / Foto: Especial |
Actualmente se encuentran tres juegos atrás de los Cuervos y se antoja difícil que puedan alcanzarlos y arrebatarles el título divisional, pero eso no quiere decir que haya que darlos por descontados. Su marca de 6-5 es idéntica a la de los Bengalíes, y ambos están un juego por debajo de los Potros de Indianápolis en lo que podría ser una lucha de tres en busca de los dos lugares como comodín en la Conferencia Americana, por lo que el cierre será importantísimo.
Lo que parece ser un hecho es que Roethlisberger va a jugar, y es que sin duda el QB sabe la importancia no sólo de este juego, si no también de los tres que le siguen. De hecho, tal vez vaya siendo tiempo de apuntar como imperdible el juego en contra de los Bengalies en la semana 17, pues más allá de la rivalidad y de ser un duelo divisional, podría representar el desempate en busca de una plaza como equipo comodín.
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